¿Conoces las muchas propiedades y beneficios del propóleo?
El propóleo o propolis es una sustancia obtenida por las abejas de las yemas de los árboles y que usan para evitar los hongos, bacterias y virus en la colmena a modo de antibiótico. Ya en el antiguo Egipto los sacerdotes lo usaban como medicina y como parte de los ungüentos para embalsamar y para conservar las vísceras.
(No confundir con la jalea real o el polen que tienen otras propiedades diferentes)
El propoleo o própolis contiene flavonoides, resinas, bálsamos, aceites esenciales, polen, minerales y vitaminas del grupo B (ayudan a conseguir energía de los alimentos, cuidan el sistema nervioso y el inmunológico) y provitamina A (se transforma en vitamina A, muy necesaria para el buen funcionamiento de la visión y para la piel).
Sus principales cualidades son:
- Es un poderoso antibacteriano, antiviral y antimicótico
- Fortalece el sistema inmune
- Está indicado contra múltiples afecciones entre las que destacan el asma, la bronquitis, enfermedades respiratorias, resfriados, gripe, enfermedades de inmunodeficiencia, enfermedades reumáticas
- Antiinflamatorio
- Analgésico
- Regula el colesterol, la hipertensión y la diabetes.
- Se han realizado diversos estudios que han puesto de manifiesto su potencial anti tumoral.
- Indicado a personas afectadas por candidiasis
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Está muy recomendado en dermatología por sus propiedades cicatrizantes y regeneradoras. Es muy beneficioso en casos de heridas, herpes, dermatitis, picaduras de insectos, eccemas, escaras y hongos.
Podemos encontrarlo como complemento alimenticio en cápsulas, jarabe, gotas, extracto o tintura; la tintura la podemos añadir además en jabones, geles (Gel de ducha terapéutico) y cremas. Se pueden encontrar caramelos y spray de propóleo muy recomendados para llagas o infecciones en la boca y la garganta.
Yo la añado a todos los productos de cosmética casera y por supuesto a las infusiones.
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